Frecuencia Zero FM

Luchando por amor al arte

Victoria Prieto, docente del Instituto Vocacional de Arte (IVA), comentó en diálogo con FRECUENCIA ZERO el estado de abandono y los problemas de infraestructura que padecen en las sedes de este establecimiento dependiente del Ministerio de Cultura de la Ciudad. La Ciudad de Buenos Aires se distingue por su desarrollo cultural. Hay instituciones como el IVA que ayudaron a consolidar esta característica. Este instituto se creó en 1913 como teatro infantil. En 1958 adoptó su formato actual de jardín de infantes y talleres de distintas disciplinas artísticas. Sin embargo, actualmente las autoridades no toman nota de la delicada situación que viven docentes y estudiantes que concurren a clase. Victoria Prieto detalla: “El IVA tuvo muchos momentos complicados en la historia. Hay tres sedes: Pío Collivadino 470 (Parque Avellaneda), en Curapaligüe 1026 (Parque Chacabuco) y otra en Garay y Solís (Constitución). Yo soy exalumna, además de ser docente. Cuando cursaba en Parque Chacabuco, había problemas de infraestructura. Hubo que mudar la sede por un tiempo para reacondicionarla. Pero ahora estamos en una situación muy compleja: se cae la mampostería; por lo que ponemos en riego a les pibes y a nosotros mismos. No hay calefacción, son edificios antiguos y se pasan fríos muy tremendos, se hace difícil trabajar. Al margen está también el tema de los materiales, que la mayoría se hacen cargo las cooperadoras. Nuestra situación es bastante patética, pero no nos afecta solo a nosotros, sino a todas las instituciones que dependemos de la DGEART (Dirección General de Enseñanza Artística-Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires)”. Una de las medidas de protesta para que se visibilice la situación fue difundir un video donde se exponía el estado de abandono en el que se encuentran las instalaciones. A pesar del impacto que esto causó, aún no hay respuestas concretas: “Estamos a fines de junio y no puede ser que recién ahora estén buscando soluciones para calefaccionar las aulas. Otra cosa que pasa es que en un predio que queremos recuperar hay asbesto (material cancerígeno) en la paredes. Por eso, más allá de que asignen un presupuesto, queremos saber cómo y cuándo se hará, para garantizar la seguridad de las personas que concurrimos”, expresó la docente. También, Victoria Prieto se refirió a la necesidad de sumar más vacantes para que más estudiantes puedan acceder a la educación artística: “Necesitamos más espacio para garantizar la demanda que tenemos. Por eso tenemos esa lucha tan fuerte para recuperar el predio de Parque Chacabuco. Nosotres trabajamos con la educación por el arte desde la grupalidad. Creemos y consideramos que es una manera de formar una sociedad mejor. El vínculo que se genera con las familias es muy fuerte”.

Dos décadas construyendo un mundo mejor

Gustavo Vera, titular de la Fundación La Alameda, al cumplirse 20 años de esta organización rememoró en diálogo con FRECUENCIA ZERO todas las experiencias que atravesaron en su lucha contra el trabajo esclavo, la explotación infantil y la trata de personas. Luego del caos y la represión de diciembre de 2001, la desesperanza  dominaba el ambiente en nuestro país. Un año después, en medio de ese panorama oscuro, floreció La Alameda: un grupo de vecinos de Parque Avellaneda que empezó  a trabajar para ayudar a los más necesitados del barrio. Luego, empezaron a involucrarse en denuncias contra el trabajo esclavo (llevaron a la justicia a más de 120 marcas, cerraron alrededor de 4000 talleres clandestinos) y la trata de personas (denunciaron más de 1300 prostíbulos en CABA y más de cientos en otras ciudades el país). Gustavo Vera, uno de sus fundadores, da testimonio de lo que vivieron a lo largo de este tiempo y el festejo en la sede de la Alameda: “Fue increíble la lucha por sostener este proyecto. Nos quisieron incendiar la sede, tuvimos atentados con armas de fuego por oponernos al trabajo esclavo. Fuimos pioneros de la ley de trata, ley para cerrar cabarets y whiskerías, removimos comisarios, gente de los servicios secretos que participaban de una red de trata y explotación. Siempre hicimos todo buscando justicia, contra la explotación infantil, el trabajo forzado. Ayer estuvieron una enorme cantidad de personas con las que compartimos innumerables luchas: trabajadores, sindicatos, cooperativistas, funcionarios judiciales, sacerdotes de barrio, periodistas y dirigentes políticos. Fue una actividad más desde el corazón que algo protocolar. Fue muy lindo festejar con todos, sobre todo con la murga y con el grupo de teatro comunitario con La Runfla, porque con ellos somos las tres patas de la organización vecinal, son parte parque avellaneda para hacer un barrio más inclusivo, más justo y más fraterno”. También Gustavo Vera, remarcó la repercusión que tuvieron las acciones de la organización alrededor del mundo: “Conseguimos hacer aportes a nivel internacional. Hay una marca global que se llama No Chains, integrada por cooperativas de Tailandia, de Filipinas, de Hong Kong, de Indonesia, que hicieron campaña para promocionar la producción libre de trabajo esclavo.  También el trabajo que hicimos para avanzar y que se tipifique el delito de trata, para que haya asistencia a la víctimas .Más allá de los errores que se puedan cometer, siempre fuimos fieles a los valores con lo que nacimos, los que tiene que ver con la solidaridad, la fraternidad y no hacerse el distraído con los que sufren. Podemos decir que tenemos honestidad intelectual y transparencia material, porque siempre se volcaron todos los recursos para transformar la realidad. En La Alameda cambiamos vidas y salvamos vidas, dimos un horizonte para algo mejor”. Por último, se refirió a lo que significa la fundación en la actualidad y la importancia del Papa Francisco para difundir sus acciones: “Hoy La Alameda existe en 20 provincias y con gente muy valiosa.  Un capítulo aparte es el impulso inicial que nos dio Jorge Bergoglio y hoy sigue vigente lo que dice de acerca de la importancia de la obra y la palabra. En La Alameda lo que decimos con el pico lo bancamos con el hombro. Por eso tenemos un pedazo de historia tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en toda la Argentina, quedó grabado en la memoria colectiva todo lo que hicimos durante estos años”.

Al calor de la solidaridad

Natalia Vilar, responsable de Vélez Social, en diálogo con FRECUENCIA ZERO dio detalles sobre la campaña “Frío Cero” que están llevando adelante desde el club con los chicos del Formativo y Recreativo  y la colaboración de All Boys para ayudar a las personas en situación de calle. A esta altura del año, las bajas temperaturas comienzan a hacerse sentir en toda la ciudad; y quienes están más expuestas a padecer por esto son las personas en situación de calle. Afortunadamente, hay gente que toma conciencia de esta problemática y pone manos a la obra para acercar una ayuda: “Desde el 2019 estamos haciendo la campaña ‘Frío Cero’. Antes de la pandemia abríamos el club. Postpandemia hacemos una recorrida, censamos a las personas en situación de calle, averiguamos qué necesitan para conseguirlo y poder ayudarlas de esa manera”, señala Vilar. Acerca de cómo será la dinámica de la campaña, la referente de Vélez Social señala: “Este año decidimos llegar a más personas. Por eso nos unimos a All Boys Solidario para expandir las calles de la recorrida. También van a participar los chicos del Formativo y Recreativo de Vélez, para que podamos alimentar en ellos, los más chicos, las ganas de dar una mano. La idea es que la gente se acerque al club de 8 a 20 h hasta el 26 de junio. Lo que necesitamos y vamos a estar juntando son frazadas, almohadas, camperas y abrigos, agua mineral y alimentos no perecederos que no necesiten cocción, como por ejemplo arvejas o lentejas enlatadas, que se pueden consumir fácilmente y aportan muchos nutrientes. El que no pueda colaborar con esto, puede venir a ayudar y colaborar con su tiempo. Eso también es muy importante”. Sobre cómo se percibe el contexto actual respecto a esta problemática, Vilar describe: “Ahora se ve mucha más gente en la calle, gente más joven e, incluso, familias enteras. Actualmente, se complicó mucho el tema de la vivienda: las condiciones para alquilar y los costos las pensiones, que rondan por los $9000 semanales. Entonces, se arma una cadena de cosas muy difíciles de superar en la cuestión de buscar trabajo, por ejemplo. Por eso, es importante que más allá del Estado, como sociedad también trabajemos para ayudar a la gente y poder encontrar una solución”. Para más información, se puede contactar en Instagram con Vélez Social.

El valor de la experiencia

Ana Carolina Corbelle es directora ejecutiva de «Diagonal», una asociación civil que trabaja en la reinserción laboral de personas mayores a 45 años. En diálogo con FRECUENCIA ZERO, comentó cómo es el programa que llevan adelante para lograrlo. En la actualidad, la juventud es sinónimo de todo lo deseable. Esto se puede ver en las publicidades, la música, el cine… Pero también en el mundo laboral: durante la pandemia, aumentó el desempleo de las personas mayores de 45 años; y 9 de cada 10 ofertas de empleo excluyen a este grupo etario. Teniendo en cuenta esta situación, que desde hace años se viene agravando, surgió el proyecto Diagonal. «Somos una asociación civil sin fines de lucro, que hace más de 20 años trabajamos en la empleabilidad de las personas mayores de 45 años. Esto surge porque cuando entrábamos en las búsquedas laborales, la mayoría decía ‘hasta 30 años’. Entonces, empezamos a preguntarnos qué pasaba con este sector. Y nos decidimos a ocuparnos en ese tema, a relacionarlos con las empresas. Nosotros decimos que el talento no tiene edad. Por eso, trabajamos para promover el desarrollo de las personas mayores de 45 años; así como la diversidad y convivencia entre las generaciones», señala su directora Ana Corbelle. En cuanto los beneficios que pueden aportar los mayores para las empresas, la especialista puntualiza: «No nos gusta hacer generalizaciones, porque no colaboran. Sí podemos decir que cada vez más empresas nos contactan porque buscan incorporar ‘talento +45’: personas que puedan sumar experiencia, compromiso, responsabilidad, el trabajo en equipo. Esto no significa que un joven no lo pueda tener. Nosotros promovemos un equilibrio: un joven debe tener oportunidad de desarrollarse en lo que estudió; y alguien mayor, que tiene la experiencia, puede seguir siendo importante para una organización. Ahora el mundo laboral cambió, ya no es solo trabajar para vivir, sino que también es una manera de realizarse como persona. Por eso, los cursos que damos no son solo para aquella gente que está sin trabajo, sino para las personas que quieren un cambio laboral, encontrar un lugar que los haga sentir más plenos». Si hablamos de puntos a reforzar para adaptar el perfil a los requerimientos actuales, Corbelle detalla: «Ahora se nota mucho en el cambio de la tecnología. Por eso, hacemos capacitaciones en este sentido. A veces, luego de los cursos, las personas se incorporan a las empresas. Pero si no se logra, por lo menos, se van con nuevas herramientas adecuadas a lo que el mundo laboral está buscando». Otro punto importante, además del aspecto técnico, es el acompañamiento en el plano emocional para los mayores de 45 años: «Con la pandemia, se produjo un desempleo global. Pero, a su vez, con la llegada de la virtualidad, pudimos acercarnos a otros países y otras provincias para asesorar a otras personas a las que no podíamos llegar. En la primera etapa, trabajamos mucho en lo emocional para fortalecer la autoestima, descartar creencias limitantes. Hoy la expectativa de vida se alargó: una persona de 60 años tiene mucho para aportar, desde su formación, talento y experiencia. Luego, también se trabaja en aspectos técnicos, como armar el CV y otras capacitaciones. También, hay casos de personas que, por una compensación por retiro voluntario, quieren emprender. Nosotros tenemos en cuenta las distintas situaciones. Pero lo más importante es que intentamos trabajar un proyecto de vida, que va más allá de lo laboral: ayudamos a hacerles ver que lo que quieren lograr es posible». Para contactarse con Diagonal, se pueden seguir sus redes sociales Instagram y Facebook .

Toda la energía puesta en ayudar

Mariela Duarte Vinelli, una de las impulsoras de la campaña “Luz para Ellos” que logró la promulgación de la ley para personas electrodependientes, habló con FRECUENCIA ZERO sobre cómo fue el proceso para que se apruebe esta normativa y cuál es su cumplimiento en la actualidad. En los tiempos que corren, donde la conectividad pareciera ser lo más importante, la falta de electricidad es una preocupación generalizada; pero para algunas personas esta cuestión vital. Por eso, Mariela Duarte Vinelli define que se puede considerar electrodependientes a quienes “necesitan de la energía eléctrica permanente y con la tensión adecuada por cuestiones de salud. Es decir, que habilita que funcionen los equipos para les permiten alimentarse, respirar, hacerse diálisis. En definitiva, permiten la vida de estas personas. Por eso dependen de la electricidad para poder vivir”.   Toda su lucha para que se tengan en consideración estas situaciones empezó con la llegada de su hija Caterina: “Ella nació prematura. Y hoy sigue teniendo requerimientos de una bomba de alimentación y un BIPAP nocturno para poder respirar mientras duerme. Por el 2015, nos habíamos quedado sin luz; fui a Edenor y nadie me solucionó nada. Entonces, comencé una campaña que se llamó ‘Luz para Caterina’, donde pedimos un grupo electrógeno; y, por suerte, a los 3 días lo teníamos en casa”. Pero esto solo fue un punto de partida para ampliar la concientización y la asistencia a todos los que atravesaban una realidad similar. “Pensando con empatía, me di cuenta de que había muchas personas que padecían esto. Y por eso se me ocurrió empezar a luchar para que se haga una ley. Así, empezamos la campaña ‘Luz para Ellos’ y logramos que en mayo de 2017 se apruebe la Ley 27.351 y un mes después se reglamente”, amplió. Mariela Duarte señala que esta normativa establece que quienes padezcan una patología que necesite de asistencia eléctrica “deben registrarse en el Registro de Electrodependientes por Cuestiones de Salud (RECS), que depende del Ministerio de Salud de la Nación. Luego, se da la opción de solicitar una FAE (Fuente Alternativa de Electricidad), como por ejemplo un grupo electrógeno o baterías”. Sobre el cumplimiento de la ley, la referente de “Luz para Ellos” consideró: “Nosotros siempre fuimos como un observatorio, para ver que la ley se cumpla. Con Edenor se está cumpliendo bastante bien. Los problemas más graves son con Edesur, que no brinda respuestas adecuadas; hay casos que pueden pasar horas sin luz. También pasa en otras provincias, donde no se escucha a los electrodependientes y no se entregan los grupos electrógenos. Hay mucha gente que por desconocimiento aún no ha podido anotarse. Lo que estamos haciendo ahora es ir profundizando más las campañas, concientizando en varios municipios para que iluminen sitios de azul, el color que distingue nuestra campaña, lanzando spots. Además, estamos hablando con hospitales, clínicas, instituciones, incluso, con médicos, enfermeras, asistentes sociales para que los pacientes que son electrodependientes no salgan de una consulta sin hacer los trámites correspondientes y puedan tener los beneficios que marca la ley”.

Bienvenida la esperanza

Nare Medina, una de las creadoras de “Bolsitos de Esperanza”, contó en comunicación con FRECUENCIA ZERO cómo nació este proyecto solidario que recibe donaciones para repartir bolsos maternales a las mujeres que más lo necesitan. Esperar un bebé es un momento único, pero muchas veces no es el más fácil. Nare se dio cuenta de que hay mucha gente que sufre dificultades y decidió poner manos a la obra: «Todo empezó hace alrededor de 2 meses. Yo tenía ropa de mi bebé para dar. Me contacté con una chica de Lomas de Zamora que tiene un comedor y me contó que armaba bolsitos. Entonces, me animé. Me junté con Luisa, que me acompaña en todo esto, y empezamos nosotras también. Luego, vinieron más de 20 voluntarias, gente que acerca donaciones. Y ahora estamos entregando bolsitos en Provincia de Buenos Aires, en Capital y hay una chica que lleva donaciones al interior”. Acerca de lo que incluyen en cada bolso maternal que entregan, Nare detalla: “Intentamos que cada bolsito tenga ropa de recién nacido, óleo, algodón y protectores para las madres. Eso es lo fundamental. Luego, si se puede, le agregamos más cosas: juguetitos, ropa para más grande, cuna, cochecitos, cualquier elemento que pueda ser útil tanto para las madres como para los bebés. Por el momento, entregamos más de 40 bolsos maternales y 50 bolsas de ropa para niños más grandes”. Otro de los temas importantes es acompañar a las madres durante el  puerperio, un momento que demanda mucha exigencia para las mujeres: “Entendemos que más allá de entregar los bolsitos, es muy necesaria la contención en el posparto. Muchas veces, las mujeres se encuentran solas con una criatura que depende 100% de ellas y es una situación difícil. Por eso, contamos con un grupo de puericultoras voluntarias que ayudan a cuidar no solo físicamente, sino también en la salud mental. Nosotras también queremos estar durante ese proceso”. Para colaborar con “Bolsitos de Esperanza”, ya sea como voluntario/a o acercando donaciones, se puede contactar a través de su Instagram: @bolsitos.de.esperanza.

La verdad de la calle

Adrián, integrante de Ser Con Vos (grupo de asistencia a vecinos en situación de calle), comentó en diálogo con FRECUENCIA ZERO cuáles son las diferencias que tienen con respecto a la metodología que emplea el GCBA para realizar el censo que registra a esta parte de la población. Y dio detalles del trabajo que vienen llevando adelante. La semana pasada, el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad de Buenos Aires realizó un nuevo relevamiento de personas en situación de calle sin la participación de organizaciones sociales que trabajan sobre esta problemática. La controversia se genera a partir del modo en que se lleva cabo: en una sola noche y sin tener en cuenta las particularidades de las personas que viven en esta situación. A esto se suma que las últimas cifras que se registran son notablemente dispares: mientras que el último censo oficial realizado en 2021 concluyó que había 2573 personas en situación de calle en CABA, ya en 2019 un relevamiento realizado por organizaciones sociales había registrado 7251 personas. Justamente, durante la pandemia, las circunstancias no mejoraron. Por eso, los números no cierran. “Nosotros somos una organización que atendemos a 100 vecinos en situación de calle y entendemos que el Gobierno hace la vista gorda sobre este tema; no pone la gente adecuada para hacerlo. Muchas personas en situación de calle son nómades. Lleva mucho más tiempo que solo una noche ubicarlos, meses quizás. Cuando hablamos con las demás organizaciones, nos damos cuenta de que son muchos más que los que dicen». «Ahora estamos hablando para unificar los registros que tenemos, ya que hay gente que atendemos en común. Y, de esta forma, hacer un relevamiento más certero. La cuestión es que no hay políticas públicas para la gente en esta situación prácticamente; son todas medidas precarias y temporales, como los paradores que sirven para un momento puntual, pero no es una solución de fondo. No hay un proyecto para sacar a la gente definitivamente de esta situación”, señala Adrián acerca de esta cuestión. Sobre el trabajo de asistencia que vienen realizando desde Ser Con Vos, Adrián detalla: “Nosotros salimos a repartir viandas todos los lunes a la noche y se empieza a formar una amistad con los vecinos después de tanto tiempo. Entonces, uno empieza a charlar. Y, más allá de lo que uno puede ver, ellos empiezan a manifestar otras necesidades. Hay muchos problemas de adicciones, problemas de salud. También, nos dicen que es muy difícil salir de la calle, que no hay muchas opciones. En los paradores no les dejan entrar todas sus pertenencias y, a veces, se las sacan entre la misma gente, no hay un control. Entonces, lo que hacemos, más allá de la viandas, es ayudarlos con los trámites que precisen. Por ejemplo, sacar el DNI, trasladarlos a algún lugar, les conseguimos ropa y ayudamos en lo que se pueda. También, hacemos reuniones entre los voluntarios de Ser Con Vos y los vecinos en situación de calle, para charlar, compartir, porque nuestra idea no es ayudarlos desde un lugar de altura, es ser pares con ellos”. En relación con las posibles soluciones que se pueden encarar para resolver la situación de las personas que sufren esta problemática, Adrián propone: “Lo primero es integrar a la organizaciones que nos dedicamos a esto, para trabajar de manera conjunta, porque lo que hacemos lo encaramos con todo el amor, la dedicación y la empatía. El Gobierno, a veces, se maneja con mucha frialdad: ‘limpia’ las calles, pero también las ‘limpia’ de gente. Lo que nosotros pensamos es que hay que ver la solución particular para cada persona, para cada familia». Y concluyó: «Habría que organizarnos, armar una mesa de trabajo en conjunto, donde el Gobierno, las organizaciones y los vecinos en situación de calle tengan la misma participación, que nadie sea más que nadie. Por eso,  decimos ‘paradores no, hogares sí’. Abrir lugares donde haya talleres de carpintería, herrería, música, literatura… Muchos vecinos quieren aprender cosas. No amontonarlos en un lugar: son personas, no ganado. Son personas que quieren volver a trabajar, que todavía, a pesar de todo lo que tuvieron y tienen que atravesar, tienen ilusiones”. Se puede contactar a Ser Con Vos a través de las redes sociales Instagram y Facebook.

“El patriarcado no es cultural, es un orden político”

Valeria Genestu Paolin, socióloga de la Universidad de Buenos Aires y colaboradora de FRECUENCIA ZERO, a partir de las repercusiones sociales y mediáticas de la violación grupal en Palermo analizó las causas que atraviesan este aberrante hecho. Un hecho tan violento como 6 varones abusando sexualmente de una mujer, algo que genera tanta indignación y dolor que no hay justificación posible. Para comprender por qué estos crímenes se suceden una y otra vez hay que desentrañar cuál es la lógica que los habilita. Por eso, Valeria Genestu Paolin señala como principal causa al patriarcado: “Un sistema de poder donde los hombres prevalecen sobre las mujeres a través de procesos de dominación, explotación y violencia. Esto se da tanto en el ámbito público como privado”. Retomando a Simone de Beauvoir, la socióloga indica que, bajo este orden, el varón tiene la necesidad de “borronear” la identidad femenina para afirmar la propia. Por eso, la define en los términos de oposición y complementariedad, dejando de lado los principios de igualdad y diferencia: “Lo masculino se caracteriza como lo objetivo, lo femenino como lo subjetivo. El primero es lo absoluto, mientras lo segundo es relativo. El hombre sería un SER (filosófico); la mujer, un ser sexuado solo con finalidad reproductiva. Por eso, las luchas feministas se basan en lograr el reconocimiento de la igualdad, en que tanto el hombre como la mujer sean lo objetivo, lo absoluto. Más allá de que hoy esto se traduzca en romper el ‘techo de cristal’, en ganar lo mismo, tener los mismos derechos, el objetivo final es ser reconocidas como iguales en esencia”. No es no: la cultura de la violación Los distintos abusos sexuales que se producen hoy en día pueden ser enmarcados dentro de lo que se da a conocer como la cultura de la violación. Para clarificar esta cuestión, la socióloga retoma a Rita Segato que afirma: “Hay que desmitificar la idea del violador como un sujeto que ejerce la acción de violar por placer sexual. No es un acto fisiológico en busca de placer sexual. Es una forma de ejercer el poder”. Lo mismo sucede cuando se quiere asimilar este tipo de crímenes a conductas animales, a la pulsión y no a la racionalidad. Una de las claves para comprender cómo avanzó la sociedad en este punto es la cuestión del consentimiento: “Ahora si en el ámbito privado un hombre quiere tener sexo y una mujer no quiere, es no, porque de otra manera es violación. Esto antes no se entendía de esta manera. El consentimiento iguala al hombre y la mujer en el plano sexual”. Sobre este punto, se puede obtener información fundamental visitando las redes sociales de Amnistía Internacional Argentina.  

«En esta guerra nadie es ingenuo»

Hernán Villar, analista internacional, en diálogo con FRECUENCIA ZERO evaluó lo que está sucediendo con la invasión rusa en Ucrania, poniendo el foco en los diversos factores que desencadenaron este conflicto armado. La tensión entre Rusia y Ucrania no es algo de reciente, desde la disolución de la USSR hasta la actualidad la confrontación fue subiendo de nivel hasta llegar a la operación militar que Vladimir Putin ordenó en la última semana. Para tener una noción más cercana a la realidad, Villar aportó algunas claves de interpretación: “Hay cuestiones internacionales que son muy difíciles de sintetizar. Para comprender lo que sucede al otro lado del mundo, con una lógica totalmente distinta a la nuestra, como es el caso de Ucrania, tenemos que ver lo que está pasando hace 50 años. No es que Putin se levantó un día con ganas de invandirla, hay muchos factores e intereses que se vienen poniendo en juego hace bastante. Ucrania se volvió un actor fundamental en materia política y energética en Europa. Por allí pasan la mayoría de los gasoductos que abastecen a distintos países y la energía es muy cara en Europa.  Desde el año pasado, cuando se empezó a agudizar todo, lo que podemos decir es que Zelenski escuchó los cantos de sirenas de la OTAN, que habían prometido apoyo armamentístico, algo que hasta el momento no ocurrió. Rusia por su parte dice que no es una invasión sino un apoyo a las provincias prorrusas de Donetsk y Lugansk, es todo un tema dialéctico. Lo que sí tomaron EE.UU y las potencias de la OTAN fueron distintas sanciones comerciales, que son el trasfondo real de lo que sucede y veremos cómo se desarrolla la guerra en este aspecto. Si Rusia queda aislado de todas las transferencias internacionales quedaría en una situación bastante endeble». Acerca de las posibles repercusiones internacionales que tenga la intervención rusa, el analista opinó: “Vivimos en un mundo globalizado, todas las cámaras están centradas en Ucrania. Esto se puede ver por toda la cantidad de búsquedas que hubo en redes sociales y navegadores. Yo creo que las repercusiones que puede tener todo esto es que Putin se erige como el villano para todo occidente y para el mundo. Es un hombre muy duro, se recuerda lo que paso con los terroristas chechenos  que tomaron un teatro (en 2002 cuando Putin ordenó gasear tanto a los terroristas como a los rehenes, terminando con la vida de más de 140 personas). Teniendo en cuenta los antecedentes, la OTAN sabía que si Ucrania se unía a su órbita Putin iba a reaccionar de esta manera, porque la amenaza que significaría tener bases enemigas cerca de su frontera no la iba a tolerar”. El escenario mundial que viene Más allá de los combates en territorio ucraniano, cada actor internacional defiende intereses propios que se dirimirán en las próximas semanas según la posición que se adopte con respecto al conflicto. Por eso, en este punto, cada decisión debe tomarse estratégicamente: “En el tablero de negociaciones no hay ningún ingenuo. Si a Rusia se le aplica sanciones muy duras, puede cortar el suministro de gas. Es cierto que EE.UU. empieza a ser exportador de gas y esto sería un gran negocio. Pero otra cosa a tener en cuenta, es que nadie quiere enfrentarse militarmente con Rusia, porque es una potencia mundial atómica y saben que si hay una escalada de los hechos se puede generar una conflagración mundial”, señaló el especialista en política internacional. Por ultimo con respecto a la posición Argentina con respecto al conflicto entre Rusia y Ucrania, Villar expresó: «Desde Cancillería hicieron un llamamiento a la paz. Está bueno para analizar porque no se detalla quién está atacando a quién. Hay que buscar la neutralidad, más allá de condenar las acciones de guerra. Hay relaciones con Rusia y China a nivel económico, por eso Argentina se mantiene orillando lo que sucede. Siempre detrás de una guerra hay intereses. En Iraq no hay democracia aunque ese era el objetivo, lo mismo en Afganistán que volvieron los talibanes después de 20 años. En algún momento le van a exigir que Argentina se pronuncie, como por ejemplo en la Asamblea Anual de la ONU. Como todavía se están dirimiendo los términos del conflicto, lo más prudente es trabajar por la paz y no dar una opinión formal ahora».  

Una ayuda para recuperar el rumbo

Fabián Tonda, presidente de FONGA (Federación de Organizaciones no gubernamentales de la Argentina para la Prevención y el Tratamiento del Abuso de Drogas) en comunicación con FRECUENCIA ZERO se refirió a como desde la organizaciones se ocupan de encarar el complejo problema de las adicciones y como el acompañamiento sin reproches a las personas que las padecen es fundamental para lograr la recuperación. La problemática de la droga volvió a ocupar el centro de la escena luego de darse a conocer varias muertes por intoxicación con cocaína adulterada en el conurbano bonaerense pero, como habitualmente sucede, se encara desde la perspectiva de la lucha contra el narcotráfico y se deja de lado que pasa con las personas que sufren adicciones, como tratar de resolver este flagelo. Para enfrentar esta ardua tarea, hoy existen organizaciones como FONGA: “La Federación nació  por los años 90. Hoy en día somos alrededor de 60 instituciones, que estamos en 14 provincias días. Nucleamos organizaciones que luchan contra las adicciones con distintas tipos de intervención,  desde programas comunitarios hasta residenciales de tratamiento”, puntualizó Tonda. En relación a como se trata el tema de las adicciones desde las políticas y lo mediático, Tonda expresó: “Cada vez que explota una situación, se vuelve a hablar. Luego se enfría y se vuelve a la invisibilidad. Pasó cuando murieron 5 chicos en una fiesta electrónica, cuando paso algo con algún famoso, el tema esté un mes en el aire y luego pasa al olvido, pero esto sigue pasando todos los días, esto es lo real. Hay consumo desmedido y se intenta banalizar esto, como por ejemplo con el tema de la marihuana, que ahora parece ser la solución de todo. Hay gente que va a consumir y no le va a pasar nada y a otra le van a pasar un monto de cosas, esto no se tiene en cuenta”. Adicciones: Un problema complejo El consumo se va extendiendo progresivamente, por eso desde las organizaciones señalan que es necesario tomar medidas urgentes: “Nosotros estamos muy preocupados porque se van corriendo los umbrales de tolerancia.  Se pierde una intervención preventiva precoz, esto tiene que ver con el nivel de daño que vamos a trabajar. Ahora la gente viene muy dañada, muy rota. Esto va cambiando constantemente y hay que adaptarse”. Las situaciones de las personas que consumen son distintas en actualidad, por eso Tonda señala: “Antes rehabilitamos a gente que había podido estudiar, que algo había podido trabajar y había una perspectiva diferente de recuperación. Ahora hay que hacer una reconstrucción casi desde cero. Los chicos que consumen creen que no tienen nada que perder, pero por el consumo temprano van a tener problemas físicos en los huesos que van a arrastrar toda la vida”. Por este motivo, desde FONGA proponen cambiar el encuadre del tema y centrarse en acompañar a las personas adictas para sobrellevar el padecimiento: “El foco habitualmente se pone en quién la vende la droga y donde, en lugar de ver que pasa con quienes la consumen y porque lo hacen. La droga no tiene vida propia, nosotros trabajamos para que la gente elija no consumir, que tenga pensamiento crítico y tenga cosas que la impulsen a salir de esto. Ahora con la pandemia hay adicciones de personas mayores, con alcoholismo, que dejaron de estar en contacto con otra gente y se encontraron encerrados, con un vacío enorme. La adicción tiene que ver con no poder manejar la relación con un objeto, la primera relación es que vienen a completar algo y parece que te hacen bien, pero en algún momento te lo van a cobrar. Para las familias, les decimos que al adicto no hay que enfrentarse, si acompañar y contener, porque de otra manera lo único que se hace es exacerbar la defensa.”