Existe una visión negativa de las fuerzas de seguridad, la sociedad no ve al policía como el vecino que está cuidandolo, sino más bien como la parte «corrupta» del sistema. El intento de resignificar ese lugar de la fuerza de seguridad fue uno de los puntos claves que se abordaron en el Ministerio de Seguridad cuando ingresó Mara Pérez Reynoso, que es ex funcionaria de la cartera.
Mara Pérez Reynoso ocupaba un lugar en el área de Derechos Humanos del Ministerio de Seguridad de la Nación entre 2015 y 2019, al cual le cambió el paradigma que traía del gobierno anterior, donde los derechos humanos eran únicamente para los que estaban por fuera de las fuerzas de seguridad. Sin embargo, lo que buscó con su ingreso a la cartera fue incluir los derechos humanos de los integrantes de la fuerza y de los externos.
En esta misma línea, planteó la humanización del policía, que implica entender que también es una persona, tiene problemas maritales, tiene que cuidar a los hijos, no llega a fin de mes, tiene que pagar los aumentos de servicios.
Pero hay una diferencia, «en algún momento el policía tiene ponerse el uniforme, olvidarse de todo, ponerse un arma en la cintura y salir a la calle y cuidar a todos, no solo a los que están a favor de la policía sino también al que no los quiere y no sabe si vuelve a la casa», señaló Pérez Reynoso.