Lanzaron un concurso para emprendimientos ambientales comunitarios

El Fondo de Apoyo y Fortalecimiento “Comunidad y Cultura Sustentable” es organizado por la Universidad Nacional de Lanús (UNLA) y Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR). Tiene el objetivo de fortalecer proyectos sociales y territoriales de escala comunitaria y aumentar los niveles de conciencia ambiental en los territorios de la Cuenca Matanza Riachuelo. Hasta el 15 de diciembre, las organizaciones sociales pueden inscribirse en el concurso de proyectos para acceder a apoyo económico o a equipamiento para emprendimientos ambientales comunitarios, orientados a la promoción de prácticas saludables con el ambiente, que mejoren la calidad de vida de las y los habitantes de la Cuenca. Según especificaron desde ACUMAR, se valorará especialmente a aquellos que promuevan la inclusión de las poblaciones de mujeres, jóvenes e identidades LGTBI+ y, en particular, de los sectores vulnerados. María José Parra, directora de Fortalecimiento Comunitario y Promoción del Desarrollo de ACUMAR, explicó que pueden presentarse tanto organizaciones sociales que tengan personería jurídica como aquellos colectivos o grupos barriales de participación que no estén formalmente constituidos. En efecto, algunos de los principales ejes para los proyectos pueden ser: agroecología, flora nativa, economía circular, fortalecimiento del patrimonio local o proyectos sociocomunitarios con enfoque ambiental, patrimonial, cultural o turístico. La línea de equipamiento entregará elementos para huertas comunitarias agroecológicas; parquizado y promoción de flora nativa; infraestructura de economía circular; pintura para murales y arte urbano; indumentaria para identidad barrial comunitaria y equipamiento para actividades lúdicas territoriales. Ante cualquier duda, consulta o inquietud, las y los interesados pueden comunicarse vía email a comunidadsustentable@acumar.gov.ar.
Audiencia pública por Sistema de Indicadores

La Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo, ACUMAR, convocó a una audiencia pública para el próximo 24 de septiembre. El objetivo es promover la participación ciudadana en relación con la revisión del Sistema de Indicadores institucional. La audiencia pública se realizará mediante una plataforma digital. Y su desarrollo se transmitirá en simultáneo, desde las 10 de la mañana, a través del canal de YouTube de ACUMAR. Las personas interesadas en participar, sean personas humanas o jurídicas, podrán inscribirse acá, desde hoy hasta las 10:00 horas del día 22 de septiembre. Deberán, además, informar la persona oradora designada y detallar brevemente el contenido de la exposición a realizar en relación con el tema de consulta. La inscripción es libre y gratuita, y no es necesario tener conocimientos técnicos para anotarse. En efecto, esta es la última instancia de la convocatoria a la comunidad para participar del Sistema de Indicadores de ACUMAR. Pues, la revisión de esta herramienta, que permite cuantificar los avances en el saneamiento de la Cuenca Matanza Riachuelo, comenzó a mediados de 2020 con el trabajo de los equipos técnicos del organismo. Cabe destacar que, de igual forma, se consideraron en el proceso las observaciones realizadas por organismos de control y otras instituciones estatales o educativas. Ya elaborada la propuesta interna de mejora, se abrieron entonces a la ciudadanía las instancias para incorporar su mirada y poder tomar en cuenta sus aportes en la reformulación del instrumento en cuestión. «Por primera vez, se realizó un proceso participativo para recibir miradas, opiniones, propuestas y críticas sobre la necesidad de actualizar estos indicadores. Se efectuaron reuniones virtuales con distintos organismos públicos y actores sociales; y la audiencia pública es un punto de inflexión para recibir todas estas opiniones de modo formal e institucional», señaló Fabio Márquez, director de la Comisión de Participación Social de ACUMAR. A la hora de realizar la revisión del Sistema de Indicadores, se tiene en cuenta la experiencia de su gestión y la posibilidad que otorga para arribar a conclusiones que faciliten la toma de decisiones políticas e institucionales. En esta nueva reformulación, se incorporarán los aportes surgidos del proceso participativo. Asimismo, los indicadores se publican en la web de ACUMAR. Aquí, cada indicador cuenta con una explicación de sus implicancias, un análisis de los resultados obtenidos en el período de medición correspondiente, información gráfica (cuadros, mapas y/o gráficos) que ilustra y/o amplía los datos presentados y, finalmente, una ficha que incluye las consideraciones metodológicas tomadas en cuenta para su construcción y análisis.
Decisiones que enturbian el panorama

Lisandro Teszkiewicz, auditor porteño por el Frente de Todos, advirtió en diálogo con FRECUENCIA ZERO que el Gobierno de la Ciudad disolvió el organismo que se ocupaba específicamente del saneamiento del Riachuelo; y denunció el desvío de fondos del presupuesto destinado para este fin a otras áreas de gestión. Luego de un informe elaborado por la Auditoría General de la Ciudad (AGCBA), quedó en evidencia que la gestión de Horacio Rodríguez Larreta desarmó el departamento encargado de resolver la problemática de la Cuenca Matanza-Riachuelo. Sobre este tema, Teszkiewicz, uno de los firmantes del documento, aportó: “Se disolvió la Unidad de Proyectos Especiales CUMAR, que era un organismo que centralizaba toda la política que tenía que ver con la Cuenca Matanza-Riachuelo de la Ciudad de Buenos Aires. En el 2008, la Corte Suprema sacó un fallo histórico que responsabiliza a los Estados de Nación, Ciudad y Provincia de efectivamente sanear el Riachuelo, no solo hacer declaraciones. Por eso, se repartieron tareas a cumplir, responsabilidades, acciones; y, entre ellas, la Ciudad debía reubicar 2500 familias. A más 10 años de terminar el censo, aún quedan familias por relocalizar, 1027 para ser exactos. Lo que significa que más de 10 años después de este fallo, hay familias que siguen viviendo no en riesgo, sino en medio del foco más grande de contaminación de la Ciudad de Buenos Aires». En consonancia con este tema, el auditor porteño agregó: «Además, lo más grave en ese sentido es que, según el informe que hicimos, en el año 2019 el Gobierno de la Ciudad dejó de hacer los controles de plomo en sangre para los habitantes de la orilla del Riachuelo. Esto es gravísimo, ya que es el indicador internacional más importante para medir el impacto en la salud que tiene la contaminación ambiental, lo que nos permite planificar políticas sanitarias. No se hicieron más estos controles y se disolvieron los organismos encargados de hacerlo en otras dependencias que nada tienen que ver con el medio ambiente”. Otro de los puntos controversiales que expuso el informe de Auditoría fue el desvío de fondos destinados al saneamiento del Riachuelo y para reubicar a los habitantes de esta zona vulnerable a otras áreas que no estaban relacionadas con este objetivo. Acerca de este asunto, Teszkiewicz precisó: “En lo primero que se nota es en el presupuesto. En el fallo, la Corte le da la responsabilidad a los Estados de invertir recursos para el saneamiento efectivo del Riachuelo, no es algo solo discursivo. Cuando elaboramos el informe de 2019, descubrimos que de los $5400 millones que figuraban para tal fin, más de la mitad (el 54,58% exactamente), en realidad, está destinado a cosas que no son el saneamiento del Riachuelo. Por ejemplo, suman programas de vivienda para la reubicación de familias de otros sectores de la Ciudad, no solo las que viven en la vera del Riachuelo. Suman campañas publicitarias, como Ciudad Verde, que tienen que ver con lo ambiental pero no específicamente con el Riachuelo. Mientras las familias siguen quedando ahí, no se reubican las empresas que siguen tirando sus vertidos, no se avanza en el saneamiento de las aguas». Como conclusión, Teszkiewicz sostuvo: «Todo esto, sumado a la suspensión de controles de plomo en sangre, a que todavía hay familias sin reubicar (y las que sí ya están en otro lugar, hace 10 años que no tienen gas natural), nos demuestra que no hay una voluntad política para resolver las cosas. La Ciudad de Buenos Aires tiene muchos riesgos ambientales. Hay uno que se cumplió, que no es un riesgo a futuro, es un problema del presente y la Ciudad lo está atendiendo cada vez menos”.
Obras claves para el saneamiento del Riachuelo

Desde ACUMAR, la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo, anunciaron importantes acciones para aliviar la contaminación hacia 2023. Tanto la construcción del Sistema Riachuelo, el traslado del Mercado de Hacienda de Liniers al partido bonaerense de Cañuelas como la creación del parque para curtiembres en Lanús son las tres grandes obras que se prevé estarán finalizadas en 2023. Daniel Larrache, director ejecutivo de Gestión de ACUMAR, contó que, en el marco del crédito del Banco Mundial, se lleva a cabo la labor con AySA (Agua y Saneamientos Argentinos) de la creación del Sistema Riachuelo. El empréstito tiene previsto tres grandes componentes: el colector margen izquierdo, el emisario subfluvial del Río de la Plata y la planta de tratamiento que une a ambas instalaciones, para que funcione por completo el programa. Larrache explicó: “Esta megaobra busca colectar las tres cloacas máximas de la Ciudad, más todas las descargas de los pluviales en época seca de la Ciudad y poder tratarlas en la planta para poder distribuirlas a través del emisario”. Asimismo, se refirió a la otra obra que lleva a adelante ACUMAR con su Unidad Ejecutora, el Parque Industrial Curtidor: ”Tiene que ver con el proyecto para dotar a la industria de las curtiembres, es una de las más contaminantes de la cuenca, de un espacio específico para el desarrollo de la actividad en Lanús”.