El Gobierno cerró en diciembre de 2020 el aeropuerto de El Palomar, que funcionaba solo para las aerolíneas low cost y estaba conectado con diferentes distritos a través del tren.
El Palomar había sido habilitado para vuelos de gran porte por la administración de Mauricio Macri en enero de 2018. A la vez, en el lugar, trabajaban más de 100.000 personas; y, en 2019, pasaron más de 1.700.000 individuos, según Aeropuertos 2000.
Por su parte, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, el exministro de Transporte Guillermo Dietrich advirtió que Aerolíneas Argentinas manejaba la política aérea y que el Gobierno tenía la mirada de que Aerolíneas debía ser monopólica y de que ninguna empresa podía competir.
A la vez, Dietrich indicó que la firma estatal se había llevado en subsidios USD 10.000.000.000; dinero con el que, según él, se podrían mejorar todas las rutas nacionales. En esa línea, resaltó que las firmas privadas no estaban motivadas para invertir en el país.
Al mismo tiempo, el exfuncionario recalcó que el aeródromo de El Palomar era una fábrica de 1.000 empleados, que aumentaría su personal a 4.000. Y alegó que la administración de Alberto Fernández había actuado con impericia, desidia y mentiras.
Además, subrayó que las firmas low cost habían conectado a las diferentes ciudades del interior. Y, contrariamente, que Fernández había quitado el plan de vuelos ejecutado en Córdoba en 2017; el cual, en su teoría, agilizaba los tiempos y bajaba los precios de los pasajes.
En ese sentido, Dietrich sostuvo que la compañía JetSMART había diagramado caminos con potencial, y que dicha aerolínea había hecho lo mismo en Chile. Finalmente, destacó que el sector aéreo era el más fácil de desarrollar, porque solo había que invertir en tecnología y en la infraestructura de los aeropuertos.