En el ciclo de entrevistas en la Legislatura Porteña, dialogamos con Matías Barroetaveña, representante de Unión por la Patria.

 

¿En qué barrio de la ciudad vive?

Soy del Barrio de Palermo.

 

¿Cuáles fueron sus inicios en la actividad política que lo llevaron a la Legislatura?

Inicié la actividad política en mi adolescencia en el peronismo, y en la Universidad de Buenos Aires me sumé a la JUP y fui consejero estudiantil y de graduados. A su vez, fui presidente de la Auditoría Porteña y desde el 2007 al 2015 me desempeñé como subsecretario ministro de trabajo y secretario de empleo.

 

Si alguien visitara por primera vez la Ciudad, ¿cuáles serían los primeros cinco lugares que no podría dejar de conocer?

Lo más lindo de nuestra Ciudad es poder tener contacto con la gente, los barrios de San Telmo, Palermo tienen una gran oferta gastronómica de bares; las actividades deportivas son importantes, se puede visitar el estadio de River. Del mismo modo, el eco parque, el parque tres de febrero y conocer el río, más allá de las dificultades de acceso a la ribera que hoy tenemos. Por supuesto, recomendaría actividades culturales como el teatro independiente, Timbre 4 en Boedo; la librería en Santa fé y Callao donde funcionaba el cine y por supuesto la oferta cultural de la ciudad, desde el Teatro Colón hasta los centros culturales independientes de todos los barrios.

 

De acuerdo a su profesión o interés, ¿qué temáticas aborda como legislador?

Si bien me concentro en la actividad de la Comisión de Planeamiento Urbano, que es donde se debate el modelo de ciudad en términos de cómo se utiliza el suelo, qué se construye y qué necesidades resuelve, lo pienso a partir de una mirada de la región metropolitana, por eso dirijo el Centro de Estudios Metropolitanos (CEM) – y que no se puede gobernar la ciudad sin pensarla como una urbe de 15 millones de habitantes, rodeada a su vez de otros municipios, donde intervienen Nación y Provincia en la discusión. Cuando uno aborda el planeamiento urbano, tiene que considerar la movilidad, las personas, y cómo se mueven a trabajar, a estudiar, a atenderse en algún hospital, es decir, una visión integral de todo eso. A su vez, me interesa mucho la comisión de presupuesto porque entiendo que justamente es la estructura impositiva, define quién paga y hacia quién se da. Yo entiendo que el Estado tiene un rol igualador de oportunidades y son, justamente, los impuestos y el presupuesto público los mecanismos a través de los cuales se realiza esa función de brindar calidad de vida, pero también igualdad de oportunidades más allá del barrio donde cada uno haya nacido. Me interesa mucho, por mi pasado en la gestión, los temas vinculados al empleo y a la producción, los temas vinculados a la ciencia y la tecnología, a la educación, lo vinculado al ambiente, a la necesidad de tener una ciudad que pueda mirar los efectos del cambio climático.

 

¿Cuáles deberían ser los lineamientos del desarrollo económico porteño?

El desarrollo económico porteño tiene que, primero, pensarse a futuro. El avance en el mundo del trabajo va a producir impactos muy fuertes en las principales empleadoras de la ciudad, que son el sistema financiero, los grandes comercios como los supermercados, donde la automatización, donde el cierre de sucursales en el caso del sistema bancario, es lo que se ve en el mundo que va a venir. La Ciudad de Buenos Aires tiene una inversión muy fuerte del Gobierno Nacional en términos científicos tecnológicos, o tenía hasta este nuevo gobierno, veremos cómo sigue, por lo cual tenemos una universidad como la de Buenos Aires, pero además sedes de otras universidades públicas y privadas, el CONICET, una enorme cantidad de investigadores, y ese es un diferencial que la Ciudad de Buenos Aires, por el momento, hoy se aprovecha en términos de posibilidad de generar valor, de generar exportaciones de servicios, y me parece que hizo el avance en la inversión en ciencia, y vincularlo a lo productivo es uno de los desafíos principales.

 

¿Qué cambios educativos, pedagógicos o institucionales propone para las nuevas generaciones?

Entiendo que la educación merece un gran debate del que tiene que participar toda la comunidad educativa, tiene que tener sus tiempos y sus procesos, tenemos que discutir mucho lo que tiene que ver con la vinculación con el mundo del trabajo,la vinculación con las nuevas tecnologías, el impacto que hoy tiene el celular, la inteligencia artificial y cómo vincularlo al aula. Y bueno, lamentablemente también ver cómo garantizamos que este esquema pedagógico pueda estar presente en todo el sistema de gestión público y privada con niveles que generen igualdad de oportunidades.

 

¿Cómo entiende la autonomía de la Ciudad, con el traspaso de la Justicia y la implementación de los juicios por jurado?

No soy especialista en temas judiciales, la autonomía la entiendo de la forma más amplia posible y estoy a favor de todas las transferencias, garantizando los derechos de los trabajadores. También estoy a favor de la participación y los juicios por jurados que brinden la posibilidad de mayor visibilidad de un poder que entiendo que tiene muchas deudas con nuestra democracia.

 

¿Cómo evalúa y proyecta la descentralización de la Ciudad y las Comunas?

Lo evalúo como un enorme fracaso el tema de la descentralización, la verdad es que las comunas seguían funcionando de la manera en la que funcionaban cuando eran centros de gestión y participación, los CGP. No existe autonomía en la ciudad y para que haya autonomía tiene que haber un esquema de coparticipación como presentado de frente de todos, donde los recursos vayan, al igual que van a los municipios en las otras provincias

 

¿Qué análisis tiene sobre la reconversión del centro porteño y la crisis habitacional post pandemia?

Respecto al centro porteño, creo que será un fenómeno que se viene dando desde hace muchos años en muchas ciudades, que es que efectivamente los llamados downtowns o microcentros van perdiendo el ímpetu que tenían en el pasado y eso va provocando mayor oferta en términos de ofertas sin demanda en términos de oficinas y espacios. Después de la pandemia también se acrecentó esta discusión. Yo creo que lo de la pandemia se recuperó bastante en términos de trabajadores públicos del centro y hoy uno ve, además, que es un lugar muy recorrido por turistas.

 

Me parece que sí, la ciudad de Buenos Aires necesita reconvertir, pero reconvertir planteando necesidades no dando subsidios para que personas propietarias de inmuebles que valen fortunas puedan reconvertirlos para seguir ganando fortunas con alquileres temporarios que le complican la vida al resto de los inquilinos aumentando el costo del alquiler, sino todo lo contrario. Es decir que si el Estado va a dar beneficios y se reconvierte, que sea para que puedan acceder a aquellos que hoy tienen complicado su derecho a la vivienda y aprovechar el microcentro que ya tiene infraestructura en términos de movilidad, en términos de cercanía a toda la inversión pública y del sector privado para poder darle mayor vida y que sea un lugar utilizado también en todos los horarios y todos los días de la semana. Con lo cual me parece un tema importante poder tratar este en la legislatura.

 

¿Qué ciudad imagina en el futuro?

Con respecto a la ciudad del futuro, uno tiende a tener miradas que puedan pensar un futuro mejor. Lamentablemente estamos viviendo un momento complicado a nivel internacional y a nivel local en términos de concentración de ingresos, guetización, separación de grupos muy pequeños de ricos que van a barrios cerrados o a megatorres y se invierte para la especulación donde hay edificios vacíos y personas viviendo en la calle. Nosotros planteamos una ciudad diferente que utilice la tecnología, la inversión, el presupuesto público para generar igualdad de oportunidades y calidad de vida. La ciudad de Buenos Aires tiene los recursos para hacerlo y ojalá podamos tener una gestión más humana, más sensible, moderna, sustentable en términos ambientales y que pueda utilizar su mirada para potenciar todas las riquezas que tiene su población, en términos culturales, productivas porque está viviendo muy por debajo de sus posibilidades.