El fuego no cesa en Corrientes. El Comando Operativo de Emergencias (COE) de la provincia informó seis focos de incendio: San Miguel, La Cruz, Concepción, Palmar Grande, Paso de los Libres y Curuzú Cuatiá. En tanto, el Parque Iberá sigue en emergencia con las llamas desde hace 55 días.
Según el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), durante enero se quemaron 27.882 hectáreas en la provincia. Una de las más afectadas por incendios forestales durante los últimos tres años, como consecuencia de las altas temperaturas y la sequía.
En este sentido, Ditmar Kurtz, coordinador de Investigación de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) Corrientes – Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), comparó los focos actuales con las 520.000 hectáreas quemadas el año pasado.
De este modo, aseguró que en 2022 no hubo solamente incendios forestales, también fueron dañados pastizales y humedales. «Fue muy caótica la situación. Este año es preocupante, pero mucho menos», afirmó el especialista en términos ambientales y productivos.
En diálogo con FRECUENCIA ZERO, el ingeniero agrónomo señaló que enero tuvo 640 focos de calor y se quemaron cerca de 30.000 hectáreas. Si bien todavía no hay datos de febrero, estiman un número similar hasta el momento. «Más del 90% de los incendios ocurren en zonas de humedales», aseveró.
«Si uno piensa que los focos son intencionales, la campaña de difusión ayudó a que se genere una conciencia social. Son muchos menos comparados con el año pasado. Puede ser que muchos sean intencionales, pero también hay una proporción de espontáneos. Una ley no va a parar los incendios. Puede ser necesaria, siempre que permita la producción de riqueza. Se detiene con concientización y educación; lo que se viene haciendo en Corrientes», cerró.