El beach vóley focaliza su cabeza en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, luego de tres meses sin pisar la arena por la pandemia del Coronavirus. La dupla masculina Julián Azaad y Nicolás Capogrosso son la ilusión argentina, teniendo en cuenta la medalla de bronce en los Panamericanos de Lima 2019.

«Estamos con muchas ganas de competir, nos estamos preparando hace mucho tiempo. Si bien esto nos afecta, el objetivo sigue intacto y las ganas están igual que siempre», afirmó Capogrosso al detallar la preparación en los meses de cuarentena.

Sin embargo, la incertidumbre continúa sobre el calendario de las competencias internacionales. «El deportista necesita objetivos a corto plazo todo el tiempo. Es lo que lo mantiene y lo hace sentir bien en el día a día», comentó. Este roce es necesario para la puesta a punto, ya que no existe un circuito interno como sucede con los mejores equipos del mundo.

De todo modos, el campeón sudamericano consideró que están «en un pie de igualdad con la mayoría de los equipos». Las potencias mantuvieron los torneos durante el verano, pero ahora están parados por los rebrotes del Covid- 19.

Pensando en el reinicio de la actividad, el rosarino se ilusionó, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, con una gira sudamericana y otra europea. Mientras esperan los partidos, los deportistas se centralizan en los trabajos físicos.