El pasado domingo hubo elecciones en Chile y sus máximos exponentes en las urnas fueron el ultraderechista José Antonio Kast, con el 29,91% de los votos, y el diputado de izquierda Gabriel Boric, con el 25,83%. Los candidatos se disputarán la presidencia el 19 de Diciembre en el balotaje.
Ambos candidatos tienen programas muy distintos, lo cual obligará a los chilenos a elegir en diciembre entre el Gobierno más izquierdista desde Salvador Allende (1970-1973) o el más derechista desde la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Los números del domingo fueron llamativos, ya que el pueblo chileno durante las protestas de los años anteriores demandó un cambio al sistema neoliberal imperante, exigiendo reformas en materia de pensiones, salud y educación, entre otros.
Como una salida a la crisis, se acordó cambiar la Constitución creada bajo el gobierno de facto de Augusto Pinochet, lo cual fue ratificado en un plebiscito donde ganó el «apruebo» por un aplastante 78%. Incluso, al momento de elegir los integrantes de la asamblea encargada de cambiar la Carta Magna, los comicios estuvieron marcados por la derrota de la centroderecha, que estuvo lejos de alcanzar el tercio necesario para influir en el contenido de la Constitución.
Franco Pardo, periodista de la Universidad de Chile y analista político, estuvo en comunicación con FRECUENCIA ZERO y contó la ultraderecha de Kast propone «una restauración conservadora frente a este proceso de cambio que ha estado viviendo Chile».
Pardo resaltó que «hay una especie de resaca después de una ola de cambio» que intenta mantener el sistema anterior y es por ello que un candidato de extrema derecha, como lo es Kast, tiene posibilidades de ganar las elecciones.
Además, el analista político destacó que el voto de los chilenos fue «territorial», cosa que antes no ocurría en la región, y aseguró que «se presenta este eje del centro y la periferia», donde Kast sacó mayor diferencia en los sectores más alejados del centro, donde está la toma de decisiones, sin embargo, Boric ganó por amplia diferencia en el centro del país.
Finalmente, Pardo criticó al otro candidato de la derecha, Franco Parisi, que hizo campaña desde Estados Unidos. «Es un impresentable para ser candidato, pero a pesar de esto tiene un millón de votos», aseguró.
