En un contexto donde la pérdida del poder adquisitivo es constante, el sueño de la casa propia es cada vez más lejano. Así lo refleja el Índice de accesibilidad al crédito hipotecario (IACH) que mide la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Ciudad.
Según la publicación una pareja porteña con sueldos propios del sector más pudiente de la clase media necesitaría más que duplicar sus ingresos si es que aspiran a que un banco les preste dinero para comprar un dos ambientes.
“En el segundo trimestre de 2022, el IACH para la adquisición de un departamento de 2 ambientes (43 metros cuadrados) en la Ciudad se ubicó en 48,2. Es decir que el ingreso de la pareja aspirante representó menos de la mitad del mínimo necesario para acceder a un crédito hipotecario en la Ciudad de Buenos Aires”, explicó en Frecuencia Zero Ignacio Mognoni, Subdirector General de Estudios Económicos y Fiscales.
«Generalmente los bancos piden que la cuota mensual no supere el 30% y hoy por hoy de los ingresos la cuota inicial de un crédito bancario para la compra de una vivienda representó el 62,2% del ingreso promedio,es decir, más del doble de lo que exigen las entidades financieras», añadió Mognoni.
Para llegar a esa cifra se supuso un préstamo hipotecario de tipo convencional, con un plazo de 20 años y una relación cuota/ingreso del 30% (la cuota representa el 30% del ingreso). El monto de financiación se fijó en el 75% del valor de mercado del inmueble, sistema de amortización francés y para el cálculo de la cuota se tomó como único costo la tasa de interés informada por el Banco Central.
Así, según el ejercicio, una pareja debería ganar hoy al menos $592.300 mensuales para poder ser sujeto de crédito y acceder a una propiedad a través de financiamiento.