A diferencia de lo sucedido en junio pasado, el bloque liderado por Rodrigo De Loredo parece que le dará los votos que necesita el gobierno para evitar que la Cámara de Diputados rechace el veto presidencial contra la Ley de Movilidad Jubilatoria. La oposición necesitará los dos tercios de los votos (172 en diputados y 48 en senadores) para anularlo, mientras que al oficialismo le hacen falta 10 para evitarlo en la Cámara Baja.
En este contexto parece que, por lo menos, 7 diputados radicales desconocerán su votación previa a favor de la movilidad y apoyarán al gobierno con el veto. Algunos de ellos son el diputado Campero de Tucumán, Soledad Carrizo y Luis Picat de Córdoba, Roxana Reyes de Santa Cruz y otros legisladores que responden a los gobernadores radicales Gustavo Valdés de Corrientes y Alfredo Cornejo de Mendoza.
Por si fuera poco, desde Casa Rosada echaron manos a la obra y convocaron a diputados del PRO, el MID de Oscar Zago y la propia Libertad Avanza para diagramar una estrategia parlamentaria que evite nuevas derrotas del gobierno nacional en el Congreso. Quien comandó el encuentro fue la mismísima Karina Milei, en carácter de secretaria general de la presidencia, y Federico Sturzenegger como ministro de desregulación y transformación del Estado. El momento de la verdad será mañana a partir de las 11 hs.