El Senado aprobó por unanimidad en comisión el proyecto que registra y regula el alquiler temporario a nivel nacional, lo que permite que la iniciativa pueda ser tratada en el recinto en una próxima sesión. El documento propone regularizar y desdolarizar a plataformas como Airbnb, además de crear un Registro Nacional de Viviendas de Alquiler Turístico Temporario. Sin embargo, la Ciudad de Buenos Aires ya cuenta con una legislación aprobada en 2019, que obliga el registro de las propiedades utilizadas para alquiler temporario, pero que no es del todo cumplida: actualmente existen tan solo 445 viviendas registradas sobre 26.200 que están ofertadas en internet.
En diálogo con FRECUENCIA ZERO, Patricio De Laet, Director General de Desarrollo Turístico de CABA, se expresó sobre esta problemática: “dentro de la ciudad sabemos que existe cada vez más cantidad de alquiler temporario, pero lo que está costando es que cumplan con la registración; con ese incumplimiento, las propiedades quedan fuera de toda regulación y el procedimiento es similar a cualquier multa, se labra un acta, se envía a dirección de infracciones, controlador, juez de falta, etc”. A diferencia del sector hotelero, “los establecimientos temporarios tienen un registro gratuito, se hace por internet y solo se informe al registro para conocer la totalidad de plazas disponibles; es importante que sepamos fehacientemente que la persona que viene a alojarse a la Ciudad tenga una relación legal con el inmueble donde va a quedarse”, afirmó.
El funcionario de la Ciudad también sostuvo que “la coyuntura económica y nosotros como sociedad no ayudamos a que el alquiler ordinario sea el principal oferente para las necesidades de los vecinos; frente al caudal de turistas que vienen, las plazas hoteleras están completas y el alquiler temporario es una buena alternativa, pero necesitamos brindar seguridad jurídica y turística”. Además, manifestó que “desde el gobierno de la Ciudad existe cierto tipo de acompañamiento a la ley que se está tratando en el Senado”, pero resaltó que la ley porteña “es un faro a seguir” y que entiende que la legislación nacional pretende copiarla: “en CABA ya tenemos regulación, así que no estamos desesperados para que salga o no”, agregó.