El pasado 1° de noviembre, la Cámara de Senadores de San Luis aprobó la «Ley de Lemas», impulsada por el gobierno de Alberto Rodríguez Saá, con 6 votos a favor y 2 en contra. La reforma del sistema electoral provincial se aplicará en las próximas elecciones generales, que definirán gobernador, vicegobernador, diputados y senadores provinciales, intendentes y concejales. En San Luis la ley había estado vigente desde 1986, hasta su derogación en 2004.

Gabriela Gonzalez Riollo, senadora nacional por la provincia de San Luis, explicó que esta ley le genera un daño importante a la vida democrática de la provincia. A su vez, es no le genera un ahorro al Estado, sino que «es un sistema muchísimo más costoso y no es sustentable».

«Es una forma de manipular a la sociedad de San Luis», afirmó Riollo, debido a que la modificación se realizó poco antes de la elección y no le genera un beneficio a la sociedad. Esta ley muestra debilidades porque el oficialismo no tiene un candidato fuerte y con esta iniciativa podría ganar su partido.

¿Qué es la ley de lemas?

Esta iniciativa implica un sistema de voto más partidista que presidencialista para las elecciones provinciales. Es decir, en un sistema político presidencialista generalmente gana el candidato que más votos obtiene. Sin embargo, con la Ley de Lemas gana el partido que mayor cantidad de votos obtuvo.

De esta manera, si por ejemplo el «partido X» con 4 candidatos saca 20 votos (candidato 1: 8 votos, candidato 2: 4 votos, candidato 3: 4 votos, candidato 4: 4), y el «partido Y» con un solo candidato sacó 18 votos. Con ese resultado pasa a gobernar el candidato con más votos del partido X.

Pero, tal como lo explicó Riollo, tal vez la mayoría del electorado no hubiese votado a ese candidato, que pasaría a representarlos. Por ello, es que este tipo de modificaciones se suele dar en un contexto en el que la oposición tiene un candidato muy importante y no ocurre lo mismo con el oficialismo.