Según el también director internacional de la red radial latinoamericana CONAICOP, la postura asumida por Francisco Bustillo convierte al Gobierno uruguayo en un cómplice de los «delitos de lesa humanidad» que se están cometiendo contra Venezuela por parte de EEUU y sus «lacayos», que incluyen el robo del oro venezolano en el exterior, y la imposibilidad para la nación caribeña de recibir medicamentos.
Subrayó asimismo que se trata de una política que no está apoyada por la mayoría de la población de Uruguay que coincide en que «en Venezuela lo que hay es un Gobierno electo democráticamente en elecciones y que representa a la gran mayoría de lo que es el pueblo venezolano».