Trabajadores del Instituto de Rehabilitación Psicofísica (IREP) ven con mucha preocupación el incremento de pacientes internados por covid-19 con discapacidades motrices en la institución y la posibilidad de que requieran un respirador y no puedan contar con el mismo.
Según cuentan los trabajadores, en 2017 el Gobierno porteño había inaugurado dos Unidades de Terapia Intensiva (UTI) con oxígeno central, respiradores, monitores multiparamétricos y dieciséis camas electromecánicas. Pero solo se habilitaron ocho por falta de personal.
Actualmente, solicitan al ministro de Salud, Fernán Quirós, la puesta en funcionamiento de la totalidad de las mismas, como así también el nombramiento de personal de salud: enfermeros, médicos y kinesiólogos, ante el colapso sanitario en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Pablo Lima, enfermero y delegado de ATE en el IREP, remarcó: “Estamos reclamando al Gobierno de la Ciudad, al doctor Quirós que se habiliten esas camas; y para habilitarlas, se necesitan recursos humanos”.
Asimismo, Lima comentó: “Realmente, es un desperdicio tener una sala totalmente equipada sin usarla con la inversión que eso requirió”.