A raíz del último informe del Observatorio de la Deuda Social de la Argentina de la UCA, se conoció que el 61,6% de los chicos de entre 0 y 17 años son pobres, por lo que llega a 8,2 millones de personas; mientras que la indigencia alcanza un 13%.
Además, la situación de inseguridad alimentaria afecta a más del 30% de los menores, llegando a más 4,2 millones de menores que tienen problemas para comer en la Argentina.
En este contexto, la investigadora del Observatorio, Ianina Tuñón, aseguró que los índices aumentarían sin las ayudas sociales. Actualmente, el 50% de los chicos reciben ayudas alimentarias y el 35% la Asignación Universal por Hijo (AUH) y otros planes provinciales. Si bien cumplen un rol muy importante, sostuvo que no son la solución sino no habría niveles de pobreza elevados.
«Tenemos que tomar conciencia de que revertir situaciones de tanta gravedad nos llevará mucho tiempo. Cambios que van a requerir dos o tres décadas de hacer las cosas bien», aseguró la especialista en diálogo con FRECUENCIA ZERO.