
En las últimas semanas, la Comuna 9 de la Ciudad de Buenos Aires, que comprende los barrios de Liniers, Parque Avellaneda y Mataderos, fue escenario de un amplio desalojo de manteros. Con la presencia del jefe de Gobierno porteño Jorge Macri y del presidente comunal Maximiliano Mosquera, se desplegó un operativo de gran magnitud sobre la colectora de General Paz, Av. Rivadavia, Timoteo Gordillo y Ventura Bosch. Esta intervención formó parte de una serie de acciones impulsadas por el Ejecutivo porteño para ordenar el espacio público, recuperar la circulación peatonal y brindar mayor seguridad en zonas de alta concurrencia.

En diálogo con FRECUENCIA ZERO, Maximiliano Mosquera explicó que el operativo respondió a un reclamo “histórico” de los vecinos, quienes señalaban problemas de suciedad e inseguridad vinculados a la venta callejera. “Esto no es un pedido caprichoso. Todos sabemos que muchas veces estos focos de manteros generan arrebatos y situaciones de riesgo para los vecinos”, afirmó. Aclaró que no se trata de una acción aislada, sino de una intervención planificada, con trabajo de inteligencia previo, que incluyó allanamientos y control de depósitos informales. Además, aseguró que se mantendrá presencia de la Ciudad para evitar la reinstalación de los puestos. Consultado sobre críticas por presunta violencia institucional, Mosquera replicó: “Violencia es que un vecino no pueda transitar su vereda o que un comerciante no pueda trabajar por la ocupación del espacio público”.
Más allá de los operativos, la gestión comunal también avanza en obras de puesta en valor en distintos puntos de la Comuna. En Mataderos, por ejemplo, se están completando las primeras tres cuadras del proyecto de remodelación del Casco Histórico sobre Avenida de los Corrales. Aunque la iniciativa original incluía la restauración de la fachada del ex Mercado de Hacienda, esa etapa se encuentra paralizada debido a que el predio es propiedad del Gobierno nacional. “Desde la Ciudad ofrecimos hacernos cargo de las obras si Nación autorizaba, pero el expediente sigue esperando una firma”, lamentó Mosquera.
Por otra parte, destacó las obras realizadas en espacios verdes como la Plaza Olivera, remodelada con un diseño de castillo medieval, y la plaza conocida como “La Monito” en Rómulo Zabala, donde además del nuevo patio de juegos con temática náutica, se amplió el predio y se reorganizó la circulación para desalentar picadas y el uso indebido del espacio. En esa misma línea, se están instalando reductores de velocidad y realizando cambios de sentido en calles aledañas, con el objetivo de brindar mayor seguridad. Mosquera subrayó que todas estas obras buscan recuperar el espacio público para el disfrute de los vecinos y fomentar una convivencia más ordenada en los tres barrios que componen la Comuna 9.