Investigadores y médicos argentinos, acompañados por otros profesionales, estudian la utilización de anticuerpos de pacientes recuperados del Covid- 19. Una vez que la persona recibe el alta- o sea que ya no tiene carga viral en sangre y no contagia- tienen anticuerpos en su sangre, generados por el cuerpo para luchar contra la infección.

 

Sin embargo, este método data de 50 años atrás cuando el médico e investigador argentino, Julio Maiztegui, aplicó este trabajo para la Fiebre Hemorrágica Argentina. Más tarde, también tuvo lugar en la poliomielitis, el SARS y el Ébola.


En esta circunstancia, Florencia McAllister, médica investigadora de la
Universidad de Texas MD Anderson Cancer Center, explicó los estudios iniciados en Estados Unidos, denominados randomizado y compasivo, durante marzo y luego continuados en la Argentina.

Si bien se espera el resultado final sobre su eficacia, la especialista destacó la seguridad del tratamiento, que sigue en etapa experimental. «Hoy no tenemos otras alternativas», afirmó en diálogo con FRECUENCIA ZERO.

Hasta el momento, mejoró la sobrevida de los pacientes en estado moderado. No obstante, las personas graves no demostraron diferencias, aunque era esperable en aquellas con fallas multiorgánicas. Ahora, resta saber cuánto bien hace y a qué población seguir aplicándoselo.

En medio de esta pandemia, los investigadores piensan cómo disminuir la reproducción del virus y cómo mejorar el estado de salud de los infectos, con las herramientas a disposición.