Antes de terminar el 2020, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó el uso del cannabis medicinal, confluyendo los proyectos de los diputados Leandro Halperín (UCR- Evolución) y María Rosa Muiños (Frente de Todos).
Dos meses después de la votación, Halperín destacó la importancia de la ley porque se eliminó el delito. Por lo tanto, cambió el escenario para las personas que tengan plantas o aceites de cannabis para uso medicinal, paliativo o terapéutico.
Lo único que podrían enfrentar es una infracción administrativa, hasta su reglamentación en el distrito. De hecho, el Legislador señaló una «caída estrepitosa» de las detenciones por este motivo, en comparación al año pasado y luego de la sanción. Es que existe más cautela hasta tanto se verifique si hay un uso delictivo.
No obstante, el Diputado porteño aseveró, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, que resta saber cómo el Estado garantiza un acceso de calidad para tratar las patologías. Hasta el momento no hubo una reglamentación en la Ciudad y el decreto nacional no lo aclara.