A partir del 2022, los estudiantes del último año del secundario van a contar con 30 horas cátedra de educación financiera y otras aptitudes para la empleabilidad: orientación vocacional, cómo armar un currículum, cómo manejarse en una entrevista laboral. Además, a esto se suma el plan para desarrollar habilidades blandas y a las 120 horas de prácticas educativas en ámbitos laborales.
Los contenidos de educación financiera estarán a cargo de empresas del sector fintech y no de los docentes. Las empresas que dictarán el curso serán Ualá, Mercado Libre, la Cámara de Fintech de Argentina, Mujer Financiera, Ripio, Balanz, Afluenta y Poincenot.
Alejandro Cosentino, CEO de Afluenta, dialogó con FRECUENCIA ZERO y sobre educación financiera, que es un programa orientado a que los jóvenes tengan una mayor información acerca del mundo financiero. Actualmente, el 95% de los jóvenes demuestran falta de educación financiera que después repercute de manera negativa en sus finanzas personales.
De esta manera, la educación financiera es importante porque trabaja sobre las competencias financieras, ayuda a las personas a saber cómo administrar mejor su dinero. El programa se orienta a que los adolescentes reconozcan la importancia del ahorro, de no endeudarse, que aprendan como se hace un presupuesto y a partir de ello tener un consumo responsable, que sepan identificar el dinero que necesitan para vivir. También, que puedan utilizar la tecnología como un aliado en las finanzas personales.
Desde Afluenta cuentan con un programa de pasantías rentadas para que los jóvenes puedan insertarse en el mundo laboral y aprendan a trabajar dentro de una empresa. «Queremos mostrarle a los chicos una ventana de lo que es el mundo laboral», resaltó Cosentino.