
Emmanuel Macron y Marine Le Pen cerraron la campaña, de cara a las elecciones del domingo, con un debate de casi tres horas. Los candidatos debatieron acerca de poder adquisitivo, asuntos internacionales, ecología y pensiones.

A pesar del debate, lo que llama enormemente la atención en Francia es la tasa de sufragio, que está incluso más abajo que la de 2017. Se podría creer que con el contexto mundial y la situación de guerra entre Rusia y Ucrania las tasas de votación subirían; sin embargo, esto no ocurrió. Incluso, se da un fenómeno muy particular, que es que los jóvenes son quienes menos se vuelcan a la política. Al pormenorizar la tasa de participación en las votaciones por rango etario, se puede observar que los jóvenes de 18 a 23 años que no votaron representan el 42% y los de 24 a 35 años representan el 36%.