El palista bonaerense Agustín Vernice, octavo en los Juegos Olímpicos de Tokio y máxima figura del seleccionado argentino de canotaje de velocidad senior, se clasificó a los Juegos Olímpicos de París en la prueba K1 1000 metros.
La relación de Vernice con el canotaje en esprint empezó con un engaño. A los 12 años, usaba el dinero de la merienda para alquilar un kayak y practicar en el arroyo, pero lo hacía a escondidas de su madre porque sentía pánico de que a su hijo le pudiera suceder algo en el agua.
A los 18 años, disputó su primer Campeonato de Mundo juvenil, y a los 20, el de categoría absoluta. El siguiente paso natural eran los Juegos Olímpicos, pero quedó fuera.
En diálogo con FRECUENCIA ZERO, Agustín Vernice contó que vio la Ceremonia de Apertura de Río 2016 con lágrimas de rabia en los ojos, pero allí nació la determinación que un año más tarde lo llevaría a ser campeón del mundo de K1 1.000 m en categoría sub-23. Siguiendo en esta linea, el muchacho relató como fueron sus años posteriores en el deporte y las cávalas que lleva consigo para la gloria.
Sin embargo, el esfuerzo y la perseverancia fueron las claves para Vernice ya que gracias a eso consiguió dos medallas de oro en los Juegos Panamericanos Lima 2019 –en K1 1000 y en K2 1000, junto a Manuel Lascano– y logró ser el primer argentino en la historia en consagrarse campeón mundial Sub 23 en Pitesti (Rumania) en K1 1000 (2017).