La Mesa de Trabajo y Consenso del Parque Avellaneda volvió a la presencialidad en el plenario llevado a cabo en la Casona de los Olivera. Durante el encuentro hubo, según la metodología sostenida hace más de 30 años, un momento informativo y otro propositivo, de discusión, de elaboración de propuestas y acuerdos.
Respecto al repaso de las actividades, cada grupo detalló su trabajo y sus avances. En ese sentido, el de Arbolado realizó una jornada de plantación de nativas y una feria de intercambio de semillas los dos fines de semana pasados. También, el proyecto Aulas a Cielo Abierto, que tiene 2 décadas, llevó a cabo un dispositivo en el Parque Avellaneda con señaladores y 19 frases del educador Paulo Freire, en conmemoración de los 100 años de su nacimiento.
Además, el grupo de trabajo de la Estrategia Urbana presentó los avances del Biocorredor Cildáñez. De igual modo, informó sobre la bicicleteada a realizarse el día 2 de octubre y la continuidad de los talleres de planificación; que buscarán desarrollar el modelo problemático y las estrategias de trabajo antes de fin de año.
Una voz de la Mesa de Trabajo y Consenso
En cuanto a los acuerdos, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, uno de los miembros de la Mesa de Trabajo, Fabio Oliva, afirmó que un eje de trabajo con el Gobierno de la Ciudad es la problemática relacionada con la gestión del Parque Avellaneda; la cual se encuentra fragmentada. Hoy, el lugar depende del Ministerio de Espacio Público, de la Secretaría de Ambiente y de la comuna.
Con tal fin, resulta necesario el cumplimiento de las Leyes 1153 y 3042. Estas imponen que la planificación del espacio sea participativa y que el patrimonio histórico-urbanístico esté protegido, respectivamente. En este sentido, concluyentemente, la Mesa exige que se respeten ambas normas. Pues, establecen que el Parque Avellaneda conforma una Unidad Ambiental y de Gestión, con un Plan de Manejo orientado hacia su recuperación integral.