Este jueves llegarían un millón de dosis desarrolladas por el laboratorio chino Sinopharm y se espera un nuevo lote de Sputnik V, creado por el Instituto Gamaleya de Rusia. A esto se suma, el arribo de las vacunas Covishield, una variante de AstraZeneca/Oxford y producida en India.
De este modo, el Gobierno busca fortalecer su plan de vacunación, en medio de los coletazos por el «Vacunatorio VIP». «Si logramos conseguir las dosis de vacunas se llegará al invierno con la población de riesgo vacunada porque el programa de vacunación de Argentina y las provincias es bien robusto», afirmó la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, en declaraciones televisivas.
Sin embargo, el ojo está puesto sobre los vacunados por fuera del protocolo, particularmente en el rango de 20 a 30 años. Es que se quiebran los criterios de prioridad y respeto de ese orden; planteó Mauro Infantino, ingeniero en sistemas e integrante de Covidstats.com.ar.
En este sentido, aseguró que los fallecidos de esa edad llegan a 319 en todo el país, sobre un total que supera los 50 mil. Mientras la tasa de detección alcanza el 0,7%. Por lo tanto, consideró que la «tragedia de la pandemia está enfocada en los mayores».
«Tenés indicios de que las vacunas bajan la transmisión, pero no es un dato confirmado. Entonces, puedo vacunarme, no generar un cuadro grave pero igual transmitir. De ningún modo, tiene sentido estar vacunando a los jóvenes si no tenemos ese dato concreto», argumentó en diálogo con FRECUENCIA ZERO.
Siguiendo su exhaustivo análisis en base a datos oficiales, Infantino sostuvo que esta situación se asemeja a una maratón. «Si vos de entrada pegás un tremendo sprint, seguro que en la mitad te quedás. Algo de eso hubo. De entrada, nos gastamos todos los cartuchos y no pensamos en el largo plazo», resumió.