Esa es una de las ideas centrales de un reciente artículo de Vladímir Putin, donde en el contexto del 75 aniversario de la victoria en la Segunda Guerra Mundial el presidente ruso defendió la vital importancia de que «se conserve y mejore» el sistema de relaciones internacionales surgido de la peor contienda en la historia de la humanidad, algo indispensable para evitar que se repitan los errores que la provocaron, con todo el insoportable precio que costó.
En este contexto, el jefe del Kremlin destacó la «sabiduría» y la «perspicacia» de los líderes de las potencias victoriosas, quienes se pusieron de acuerdo en crear un mecanismo que les permitiera permanecer dentro del marco de la diplomacia al resolver las diferencias que surjan. Su elemento fundamental es el Consejo de Seguridad de la ONU, «un mecanismo único para prevenir una gran guerra o un conflicto global».
De acuerdo a Vladímir Putin, los intentos de quitarle a ese organismo su rol fundamental —habiendo llamamientos para abolir el derecho a veto, así como las demás potestades de las que disponen sus miembros— son una extrema «irresponsabilidad», puesto que significaría la desaparición de «la única alternativa razonable a un choque directo de los países más grandes».
Dejó claro que es en esta dirección en la que apunta la presente campaña que busca igualar a la URSS con la Alemania nazi, para bajo este pretexto, cuestionar la posición que ocupa Rusia en la ONU y su Consejo de Seguridad. Como ejemplo citó la resolución Sobre la importancia de preservar la memoria histórica para el futuro de Europa aprobada por el Parlamento Europeo en 2019, que acusaba explícitamente al Gobierno soviético —junto con el de Adolf Hitler— de desencadenar la Segunda Guerra Mundial.
Un documento que es «una gran mentira histórica que no resiste en absoluto el examen de los hechos», según dijo a Radio Sputnik el intelectual español Higinio Polo, doctor en Historia Contemporánea por la Universidad de Barcelona.
«La derrota del nazismo y del fascismo en Europa fue posible gracias al sacrificio soviético. La tiranía y el horror de los campos de exterminio nazis terminaron cuando el Ejército Rojo entró en Berlín, y por eso es especialmente vergonzosa la resolución que aprobó el Parlamento Europeo», enfatizó, al recordar que «la Unión Soviética perdió 27 millones de sus ciudadanos, que representa casi el 50% del total de víctimas de la guerra», además de haber ganado las batallas «absolutamente decisivas para el curso de la Segunda Guerra Mundial».
Según el también publicista, la política de «minusvalorar el sacrificio soviético durante la Segunda Guerra Mundial» viene desde lejos y empezó con Harry Truman, quien presidió EEUU entre 1945 y 1953, lográndose convencer a gran parte de la opinión pública internacional de que «EEUU había sido el principal artífice de la victoria contra el nazismo», fruto de «campañas de propaganda masivas, con la aportación del cine de Hollywood y de la televisión».
Para Higinio Polo, el presidente ruso «tiene razón» al denunciar las tentativas de socavar el orden posterior a la Segunda Guerra Mundial, constatando que «todo este orden de posguerra está siendo destruido, porque EEUU ha ido abandonando con diferentes pretextos toda una serie de acuerdos entre las principales potencias».
«Recordaré los más importantes: EEUU abandonó el tratado ABM de misiles antibalísticos, lo hizo ya en 2002, en la presidencia de George Bush; el año pasado abandonó el tratado INF de misiles de medio y corto alcance; ha abandonado el tratado de Cielos Abiertos; ha iniciado desde hace ya un par de años la construcción en el Este de Europa y también en Asia de escudos antimisiles que eran un tipo de escudos que prohibía precisamente el tratado ABM, algo que llevó al fin del Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa; y en medio de esta terrible pandemia que está padeciendo el mundo, EEUU incluso ha tenido la desvergüenza de romper con la Organización Mundial de Salud, a la que acusa de ser una especie de títere o de marioneta de China, sin que eso resista ningún tipo de examen. Además, en estos momentos hay el temor de que EEUU no quiera renovar el tratado START III —que es el principal tratado de desarme nuclear que hoy tiene el planeta— y que incluso llegue a abandonar el Tratado de Prohibición de Pruebas Nucleares», subrayó.
«¿Cuál es el objetivo de EEUU tomando todas estas decisiones? Sin duda, tener las manos libres para mantener su hegemonía en el mundo, porque EEUU no quiere un mundo de iguales. Por eso toma estas decisiones y ello es de una enorme gravedad, porque puede desatar una nueva carrera de armamentos e incluso poner en peligro la paz», agregó.
Ante ello, Higinio Polo coincidió en la necesidad de preservar la existencia de la ONU, «un instrumento absolutamente decisivo que estimula la negociación, asegura en gran parte la coexistencia pacífica, y también estimula la colaboración entre países para resolver los problemas que padece el planeta».
«Mi opinión es que es decisiva la función que desempeña la ONU y es lógico, que tanto Rusia como China, destaquen el papel de la ONU, y dentro de ella, la función del Consejo de Seguridad, sobre todo para resolver conflictos y para mantener la paz mundial», recalcó.
Apuntó, al mismo tiempo, que «es cierto que la ONU no ha podido impedir guerras de agresión en los últimos años, como las que ha lanzado EEUU y sus aliados en Irak, Siria o Libia; y también no ha podido evitar operaciones de acoso a otros países mediante bloqueos económicos, incluso golpes de Estado».
«Es verdad que la ONU no ha podido impedir eso, porque EEUU y sus aliados han actuado al margen del derecho internacional, [de] la Carta de la ONU y del propio Consejo de Seguridad. Pero en mi opinión no hay duda de que el mundo sería mucho más peligroso sin la existencia de la ONU», insistió.
En este contexto, celebró la iniciativa rusa de llevar a cabo una reunión de los líderes de los cinco Estados nucleares, miembros permanentes del Consejo de Seguridad, donde según Vladímir Putin, «es aconsejable discutir los pasos para desarrollar principios colectivos en los asuntos mundiales, hablar francamente sobre el mantenimiento de la paz, el fortalecimiento de la seguridad global y regional, el control estratégico de armas, los esfuerzos conjuntos para combatir el terrorismo, el extremismo, y otros desafíos y amenazas urgentes».
«No cabe duda de que la cumbre de Rusia, China, Francia, Estados Unidos y el Reino Unido desempeñará un papel importante en la búsqueda de respuestas comunes a los desafíos y amenazas modernos y demostrará un compromiso común con el espíritu de alianza, con esos altos ideales y valores humanistas por los cuales nuestros padres y abuelos luchaban hombro con hombro», escribió el mandatario ruso.
«La propuesta es pertinente», dijo al respecto Higinio Polo, al indicar que la propuesta de Putin «puede abrir espacios a la negociación».
«El mundo, en mi opinión, debe forzar a EEUU a entrar en la vía de la negociación para conseguir fortalecer la paz en el planeta, para acabar [con] las guerras en Oriente Medio, también en Yemen y en Siria; para incrementar la seguridad de los diferentes continentes y para continuar el proceso de desarme nuclear. Pero yo tengo la impresión de que todo eso no va a ser precisamente fácil, a la vista de las decisiones del presidente norteamericano Trump», concluyó el intelectual español.